Mientras que el secretario Carstens dice que no hay excedentes petroleros, los diputados dicen lo contrario, y se alza en la polvareda la evidencia de que el plan petrolero de Calderón consiste en privatizar PEMEX, para pagar su deuda personal del apoyo de Estados Unidos y por otro lado, la de beneficiar a una nueva plutocracia con lazos directos con el gallego que funge como secretario de gobernación, Mouriño.
Lo contradictorio salta en cuanto vemos que el gran negocio petrolero no ha sido capaz de dar pan y trabajo a millones de mexicanos, ya que a estas alturas es inocultable la crisis alimentaria que azota la nación, al tiempo que bajan los ingresos por concepto de remesas.
La crisis alimentaria nacional se debe, según legisladores del PAN y el PRD, a la gran demanda de alimentos en China y la India, así como al uso de granos básicos para producir biocombustibles y el aumento de precios en los energéticos.
De septiembre pasado a la fecha el arroz aumentó 33%; el aceite, 50%; el huevo, casi 60%, y el frijol, 12%. Al respecto, la Coparmex advirtió que la carestía podría durar al menos 24 meses, por lo que propuso revisar la política agrícola y alimentaria, dar apoyos directos a grupos vulnerables, permitir más importaciones y evitar prácticas de acaparamiento. Senadores del PAN y del PRD consideraron que ante la crisis alimentaria, el gobierno federal debe aplicar programas de subsidio a la población más necesitada y de apoyo a los productores del campo.
Lo contradictorio salta en cuanto vemos que el gran negocio petrolero no ha sido capaz de dar pan y trabajo a millones de mexicanos, ya que a estas alturas es inocultable la crisis alimentaria que azota la nación, al tiempo que bajan los ingresos por concepto de remesas.
La crisis alimentaria nacional se debe, según legisladores del PAN y el PRD, a la gran demanda de alimentos en China y la India, así como al uso de granos básicos para producir biocombustibles y el aumento de precios en los energéticos.
De septiembre pasado a la fecha el arroz aumentó 33%; el aceite, 50%; el huevo, casi 60%, y el frijol, 12%. Al respecto, la Coparmex advirtió que la carestía podría durar al menos 24 meses, por lo que propuso revisar la política agrícola y alimentaria, dar apoyos directos a grupos vulnerables, permitir más importaciones y evitar prácticas de acaparamiento. Senadores del PAN y del PRD consideraron que ante la crisis alimentaria, el gobierno federal debe aplicar programas de subsidio a la población más necesitada y de apoyo a los productores del campo.
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