El municipio es la base de la división territorial de las entidades federativas. Se dice que es la célula del federalismo mexicano y la base de la descentralización política y administrativa de la nación.
A partir de 1999, el municipio asume con carácter de exclusiva la prestación de los servicios públicos, pero sigue dependiendo de la tutela estatal y de los recursos federales, con lo que en la práctica, termina siendo una dependencia de otros órdenes de gobierno, haciéndo nulo el supuesto de la autonomía municipal.
La administración del territorio y la decisión acerca del uso y destino del suelo, son áreas de decisión de los ayuntamientos, pero esto se ve comprometido por el peso de la influencia del gobierno del Estado.
Un caso grave lo encontramos en el parque de Villa de Seris, donde la autoridad municipal se plegó a la decisión y los intereses del gobernador del Estado de Sonora. La ciudad capital de Sonora ahora sufre la pérdida de un espacio verde y la vaga promesa de que se recuperará, al margen del ritmo y circunstancias del crecimiento natural de los árboles y los factores que lo determinan.
En Hermosillo, Sonora, tenemos un claro ejemplo de ecocidio y de menosprecio al supuesto de "municipio libre", dícese"célula del nuevo federalismo mexicano".
La ciudadanía reclama lo que le corresponde del gobierno: respeto y seriedad en los compromisos constitucionales de cada órden de gobierno.
A partir de 1999, el municipio asume con carácter de exclusiva la prestación de los servicios públicos, pero sigue dependiendo de la tutela estatal y de los recursos federales, con lo que en la práctica, termina siendo una dependencia de otros órdenes de gobierno, haciéndo nulo el supuesto de la autonomía municipal.
La administración del territorio y la decisión acerca del uso y destino del suelo, son áreas de decisión de los ayuntamientos, pero esto se ve comprometido por el peso de la influencia del gobierno del Estado.
Un caso grave lo encontramos en el parque de Villa de Seris, donde la autoridad municipal se plegó a la decisión y los intereses del gobernador del Estado de Sonora. La ciudad capital de Sonora ahora sufre la pérdida de un espacio verde y la vaga promesa de que se recuperará, al margen del ritmo y circunstancias del crecimiento natural de los árboles y los factores que lo determinan.
En Hermosillo, Sonora, tenemos un claro ejemplo de ecocidio y de menosprecio al supuesto de "municipio libre", dícese"célula del nuevo federalismo mexicano".
La ciudadanía reclama lo que le corresponde del gobierno: respeto y seriedad en los compromisos constitucionales de cada órden de gobierno.
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