Notas Sueltas es un espacio de opinión sobre diversos problemas de carácter social, económico y político de interés general. Los comentarios pueden enviarse a: jdarredondo@gmail.com

martes, 31 de marzo de 2009

Rector habemus


Hoy se supo temprano por la tarde, que los pronósticos se cumplieron: el nuevo rector es Heriberto Grijalva Monteverde, químico y cajemense del equipo de Pedro Ortega Romero.

Lo que hay que señalar con énfasis es la transparencia del proceso de selección: siempre se supo quién era el candidato oficial y encarnación del continuismo quimiocrático, ahora formalizado por medio de la Junta Universitaria.

En lo personal, felicito a Heriberto como se felicita a alguien conocido que logra algo. Como universitario, lamento que su ascenso haya sido por medios tan alejados de la democracia y tan cercanos a la vulgaridad de una designación en el seno de un órgano que bien pudiera no existir en una universidad que se supone madura y consolidada. Difiero profundamente de la expresión "la universidad no se puede reinventar todos los días", porque es justamente lo que hace una comunidad viva y actuante que concentra a la inteligencia y permite el oficio académico como forma de vida y expresión.

Si Heriberto Grijalva promete la continuidad o el continuismo, supone que la ruta seguida es la mejor para la institución, y resulta que muchos no estamos de acuerdo. Se ha caído en la simulación como forma de relación con la sociedad, se ha pervertido el trabajo académico en aras del fortalecimiento burocrático, se han atado la inteligencia y la creatividad a los mil y uno formatos que decide alguna instancia oligofrénica allende las fronteras del campus universitario.

Sin duda alguna, la inteligencia universitaria resiente y resentirá la complacencia comodona del que cree que las cosas están bien y deben seguir igual. Espero sinceramente que Heriberto reaccione como universitario ante la evidencia de que la degradación burocrática es un mal progresivo y mortal.

La elección de rector en la UNISON


Entre gritos y susurros la comunidad universitaria de Sonora va contando los días, horas y minutos que faltan para conocer la suprema decisión de la Junta Universitaria, el órgano elector del rector de la máxima casa de estudios.

Hay funcionarios menores que insisten en ascender en la escala zoológica de los puestos burocráticos, con el ánimo de alejarse por un tiempo más de los afanes de la vida académica; tenemos otros que suponen estar dotados de virtudes y cualidades especiales que los hacen candidatos naturales a los complementos al sueldo, a los entretelones de la repartición de cargos y abonos administrativos, a las concesiones y prerrogativas del primer mundo universitario; pero también tenemos a nueve de 15 candidatos que aspiran a cumplir con las formalidades de una elección acotada, delimitada por la exclusión y el subdesarrollo democrático.

Quede quien quede, será producto de una decisión ajena a las mayorías universitarias, mudos testigos del encumbramiento de alguien por obra del dedo que mece la cuna universitaria.

De los nueve que hicieron posible la simulación de un juego parecido a una elección, siendo simplemente selección prescrita como mecanismo legal de acceso a una representación legal, pero no legítima, saldrá uno rodeado de humo blanco y fanfarias mercenarias. Mientras tanto, en los vericuetos de la realidad universitaria, pesará el recuerdo de la democracia que hubo y se perdió, de la academia triunfante que cedió, merced al actual marco legal, su primogenitura por un plato de lentejas beltronianas, quedando supeditada al monstruo burocrático y su babeante presencia en la forma y el fondo de las prácticas universitarias vigentes.

El nuevo rector universitario será uno más en la cadena de frustraciones que arrastra una comunidad otrora pensante, ahora pastante.

viernes, 20 de marzo de 2009

Foro de desarrollo municipal


El día jueves 19 se celebró el VI Foro estatal para el desarrollo municipal en la ciudad de Navojoa, Sonora, organizado en la Unidad Regional Sur de la Universidad de Sonora por la División de Ciencias Económicas y Sociales.

El evento constituye un eslabón más en la cadena de esfuerzos por conocer, analizar, definir y detallar las circunstancias que rodean al desarrollo regional que, en este caso, puso su acento en el personaje fundamental de las transformaciones regionales: el municipio.

En esta ocasión asistieron representantes de los municipios de Huatabampo, Etchojoa, Navojoa y Benito Juárez. Ahí se expuso la problemática desde el punto de vista de sus actores provilegiados, como son los funcionarios municipales que tienen que ver con el desarrollo económico de sus comunidades.

Falta, desde luego, mucho por hacer, pero lo trascendente de esta reunión es que se reconocieron fallas, carencias, inercias así como también las acciones que se emprenden y las que se habrán de emprender.

Hay municipios donde el mayor peso de la actividad económica recae en las actividades agrícolas y ganaderas, otros cuentan con pesca, con minería, la mayoría con evidentes ventajas turísticas; algunos tienen potencialidades industriales que una vez desarrolladas iniciarán la otra historia del Mayo.

No cabe duda que un sector industrial desarrollado puede hacer de locomotora que jale al resto de los sectores, sin dejarse de considerar una terciarización acorde con esto.

El Mayo es una región altamente promisoria en muchos sentidos. En el VI Foro de desarrollo municipal se descubrieron a los ojos de los asistentes, algunas de las promesas que pueden ser cumplidas, con el concurso de la institución promotora: la Universidad de Sonora. Felicidades.

miércoles, 11 de marzo de 2009

elecciones


Las elecciones suponen un ambiente y una voluntad para decidir, de entre varias opciones, la que al votante parezca que reune los requisitos de idoneidad, capacidad y confiabilidad. El proceso electoral parte del supuesto de la equidad y la transparencia, por lo que los resultados son acatables por todos, ganadores y perdedores. Cuenta, en este caso, con la credibilidad que le da la certidumbre de ser legal y legítimo.

La democracia exige que las responsabilidades públicas del más alto nivel sean asumidas por quienes fueron favorecidos por el voto mayoritario de los electores.

En la Universidad de Sonora, la democracia no es directa, ni indirecta. Simplemente la elección del rector se deja en manos de un pequeño grupo de notables sujetos a sus propias circunstancias, es decir, al margen de las aspiraciones de los académicos, empleados manuales y administrativos y estudiantes.

Se han registrado 15 aspirantes, de entre los cuales la Junta Universitaria decidirá quién es el futuro rector, a partir, se dice, de una auscultación a quienes expresamente soliciten audiencia para opinar a favor de tal o cual personaje. "Los más mencionados", pasarán a ser considerados elegibles y, en una última etapa, la Junta decidirá quién ocupará el cargo.

En este marco de relaciones, es legal la minusvalía de la opinión de los universitarios, que puede o no ser tomada en cuenta según la soberana discreción de los miembros de la Junta.

Se sabe que hay un candidato de la Administración que, para variar es químico y oriundo de Cd. Obregón. La cargada hace acto de presencia y los apoyos matraqueros se convierten en mecanismo de sobrevivencia de la burocracia, en un ejercicio desangelado por necesidad.

Otros, se quedan con la ilusión de que los cambios son posibles dentro de los estrechos cauces de la insistencia propositiva.

Pero, la democracia, ausente en la vida institucional, es el verdadero expediente de la transformación, es el eslabón perdido, la piedra de toque, el oscuro objeto del deseo de una mayoría anodina y pusilánime que cuida la posibilidad de ingresos adicionales al salario por vía de la dádiva fundada en la simulación.